martes, 28 de octubre de 2008
Resoluciones indescifrables
Cultivo ese arroz que no comes, esa vida que se extingue. .... Regresas con la emoción en la ropa que no te quitas. .... Eres tan extraña como yo, y por ello nos distanciamos de las etapas que nos nutren mal. .... Tratamos de entender que las cosas son extrañas, y somos desde la diferencia que nos aprecia con un genio incomprensible. .... No me ofrezcas flores que no podemos probar. Hablamos desde el desaire que nos convence al revés. .... Nos quedamos con una opresión en el vientre que nos altera todos los ritmos. .... Quemamos espacios y fronteras, y recibimos algunas órdenes que nos impacientan. .... Resistimos como podemos, y nos quedamos con la blancura de unos sentimientos ciertos. .... Nos apenamos y nos alegramos casi al mismo tiempo, con una pizca de gracia. .... Vemos como la vida nos cambia, y sentimos el temor por lo que no controlamos, que es todo. .... Practicamos la virtud de las apariencias, que no sirve para nada, que no es tal. .... Rivalizamos en experiencias negativas, pero debemos empatizar en lo que sirve de aprendizaje. .... Nos comunicamos con versos de amor que nos engarzan con lo más natural. .... Prestamos una declaración no hablada, no escrita, casi no entendida. Nos abrazamos, y todo sobra. .... Recordamos aquella impaciencia en la que fuimos el resultado de un amor hermoso e indómito que nunca se agotó. Sigues en el mismo sitio. .... Resuenan aquellas campanas en las que todo era ideal. Volvimos con la posibilidad de darnos lo más querido. .... No decimos la base, ni contamos el secreto, ni nos embarcamos para salir de un atolladero que es tan solo virtual. .... Resulta lo más inverosímil. Nos mostramos cautelosos ante las diversiones que nos quitan las palabras. .... Nos mofamos del destino estéril que no cura los mordiscos de una existencia llena de contradicciones. .... Nos recluimos en unas cuevas oscuras que nos cautivan con un anonimato insoluble. .... Hablamos de apariencias, de posturas creíbles, y nos ponemos a navegar con lo más amado. .... Me llamas en un momento álgido que nos conmueve con resoluciones indescifrables.
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