miércoles, 24 de septiembre de 2008
Ya no estoy en tu lista
Juntamos vida y noche con recuerdos que resumen los argumentos que no defendemos con la prisa y con la convicción de antaño. Nos apresamos ante situaciones que nos dejan sin ideas, y sentimos que las conformidades nos ofrecen más de lo mismo, que es la nada más absoluta. Estoy por ti, pero callo, pero solo sigo el camino del lamento. No hay, no tengo, ya no estoy en tu lista.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario