Te has metido en mi corazón

Me animo a tocar esos labios que me dijeron lo que debería ser el todo para mí. Me entusiasmo con las razones que me regalas en este universo de peticiones maravillosas y excelentes. Agudizas un ingenio de amor que me propone seguirte hasta una isla de frutos maduros y de sabor azucarado. Te has metido en mi corazón, y no quiero que salgas de él.